Según la prensa estadounidense, el mes pasado un grupo armado entrenado por el Pentágono atacó a otro grupo... entrenado por la CIA. ¿Cuál es la lógica, superior a la del Departamento de Defensa y a la de los servicios secretos, que anima los actos de la Casa Blanca? ¿Por qué Washington está dispuesto a sacrificar a sus aliados para seguir prolongando más y más esta guerra? ¿Por qué impusieron Rusia y China su veto a Estados Unidos, desde 2012?

La nueva ruta de la seda.
Thierry Meyssan: Hola. Hace un mes, la prensa estadounidense revelaba que tropas entrenadas por el Pentágono estaban luchando contra otras tropas, entrenadas por la CIA, en el norte de Siria.
La prensa, en Estados Unidos, se asombraba ante estas contradicciones. Nosotros, en cambio, llegamos a una conclusión.
Hasta ahora, habíamos interpretado las oposiciones internas de la política de Estados Unidos como una oposición entre dos grupos diferentes: de un lado, los que eran favorables a la paz aquí [en Siria], y del otro lado, los que querían continuar con el proyecto de rediseño del "Gran Medio Oriente" y, por consiguiente, desbaratar todo.
Pero este hecho, estos grupos que luchan entre sí, nos muestra que hay otra lógica diferente a esas dos y una lógica que es superior a esas dos. ¿Cuál es esa lógica?
En realidad, para entender lo que constituye el fondo de la estrategia internacional de Estados Unidos no podemos limitarnos a mirar Siria y nada más. Hay que mirar simultáneamente el conjunto del proyecto en el mundo entero.
Y, ¿qué vemos entonces?
Hay actualmente dos grandes focos de guerra: Siria y Ucrania. Hay, además, tensiones en desarrollo en el Mar de China. ¿Por qué? Porque Estados Unidos, para conservar su dominación económica y política sobre el resto del mundo, tiene que garantizar que China y Rusia nunca lleguen a desarrollar vías comerciales continentales que les permitirían invadir los mercados europeos y, finalmente, llegar a dominar económicamente el conjunto del planeta.
Por lo tanto, Estados Unidos tiene como proyecto impedir la construcción de la "Nueva Ruta de la Seda" que el presidente chino había anunciado en 2012 y que constituye el objetivo mismo de su presidencia. Ustedes recuerdan seguramente que la Ruta de la Seda es aquella ruta que existió en la Antigüedad, alrededor de 500 años antes de Cristo, y que iba desde la antigua capital china, en Xi'an, hasta el Mediterráneo a través de toda Asia Central y luego Pakistán, Irán, Irak, Siria. Esa Ruta pasaba por el desierto, llegaba a Palmira y luego a Damasco, donde se dividía en dos. La mercadería pesada partía hacia Antioquía, hoy perteneciente a Turquía, lo cual es reciente porque entonces era Siria, y había una segunda ruta para la mercadería más ligera, ruta que era por consiguiente más rápida y que iba hacia Tiro, hoy territorio libanés. De allí, las mercancías chinas llegaban a todo el Mediterráneo y a toda Europa.
El proyecto del presidente chino Xi Jinping es restablecer esa ruta comercial y crear además otra, que iría a través de Rusia y Ucrania hasta Berlín y toda Europa.
Así que la operación realizada en Ucrania corta la Ruta de la Seda en ese punto. Se proyectó entonces pasar por Bielorrusia, el señor Xi viajó entonces a Bielorrusia y se firmaron muchos tratados en aquel momento. Pero ahora Bielorrusia está cambiando de bando y ustedes saben que, hace algunos meses, Bielorrusia vendió armas a Qatar, armas que probablemente fueron utilizadas por los yihadistas aquí [en Siria]. Pero eso último no es seguro. También es posible que se hayan utilizado en Libia o en Yemen.
En todo caso, la ruta que debía pasar a través del Asia Central no puede, en este momento, atravesar el desierto iraquí ni el desierto sirio. Pero hay otras dos posibilidades: pasar por Turquía o pasar por el Canal de Suez, y ya se sabe que el año pasado China multiplicó por dos la capacidad del Canal de Suez.
O sea, si analizamos todo esto, eso quiere decir que no es posible - por el momento - liberar la totalidad del territorio sirio y que hay que considerar que, en un primer momento, la frontera entre Siria e Irak seguirá siendo una zona de caos. Pero, aún así, eso no impide que se libere el resto del territorio. Eso debe implicar una reorientación de la estrategia militar ya que, de ser exacto este análisis, Estados Unidos no permitirá nunca - en la actual situación - que se restablezca la paz en la frontera sirio-iraquí, aunque sí es posible desde ya liberar Idlib y Alepo, por ejemplo.
Así que tenemos que conservar en mente esta estrategia. Darnos cuenta de que esta estrategia domina las relaciones internacionales en su conjunto ya que, hoy en día, por ejemplo, las negociaciones comerciales de Estados Unidos - el TTIP con Europa, el TPP con la ASEAN [Asociación de Países del Sudeste Asiático] - tienen como único objetivo mantener la Unión Europea fuera de los contactos con Rusia y la ASEAN fuera de los contactos con China. Pero es en ambos casos la misma estrategia de Estados Unidos para impedir la creación de la Nueva Ruta de la Seda.
Mantengamos entonces este análisis en mente y reorientemos la estrategia militar.
Fuente:
La televisión estatal siria