sábado, 26 de julio de 2014

Ataque mundial contra la Iglesia Católica

El ataque sistemático contra la iglesia católica lleva como objetivo la desaparición del papado. El ataque se deja ver por los judíos sionistas y grupos económicos que sienten un gran contra peso en la iglesia. Sectas al servicio de los masones illuminati la han quebrantado, creando pésima publicidad. 

¿Pero, cual es la razón?

Todo parece indicar que una de las grandes razones es el control sicológico y emocional para controlar, de una manera mas fácil a los cristianos.

Usted decida, el artículo siguiente es del 29 de Abril del 2010.

 Angel Sandoval

Gracias por compartir.

 

 

Los ataques a la iglesia católica han sido debastadoras.

Ataque mundial contra la Iglesia Católica

Para entender la embestida mundial contra la Iglesia católica, so pretexto de abuso sexual y encubrimiento, es necesario leer cuatro documentos:

 
 
 
 
 
 
1-    “La carta de un senador agnóstico”, escrito por el Sen. Marcello Pera (Carta al director del Corriere della Sera, Milán, 17-03-2010, pag. 23. Trad. Noticias Globales. Marzo 24, 2010)
2-    “Justicieros”, del escritor judío Jon Juaristi (ABC, Abril 4, 2010).
3-    “Esto hay detrás de los ataques contra Ratzinger”, de Andrea Tornielli (Abril 11, 2010 Ilgiornale)
4-    “El que esté libre de pecado”, escrito por el primer alcalde judío de Nueva York, Ed Koch (Jerusalem Post).





DOCUMENTOS:

1-
http://www.noticiasglobales.org/comunicacionDetalle.asp?Id=1329

En la carta al director del Corriere della Sera, el senador Pera (no católico) afirma que la cuestión de sacerdotes homosexuales y pedófilos tiene como objetivo al Papa: “Está en curso una guerra”.

Pero el propósito no es el Papa en última instancia, sino que se trata de un ataque del laicismo contra el cristianismo, pero cuyo fin inmediato es desprestigiar a la Iglesia, mediante la generalización, para quitarle su ascendiente moral. “Lo que importa es la insinuación, incluso a costa de lo grosero del argumento: los sacerdotes son pedófilos, por tanto la Iglesia no tiene ninguna autoridad moral, por ende la educación católica es peligrosa, luego el cristianismo es un engaño y un peligro”.

En el fondo, es un embate relacionado con el relativismo y la pérdida de la fe, con el aborto y el matrimonio homosexual.

Se trata de una guerra que no va a terminar, si no que seguirá arreciando cada vez más.



****

2-
http://www.aciprensa.com/noticia.php?n=29055

El escritor judío Jon Juaristi señala que “no es necesario ser católico para ver hacia dónde apunta la campaña mediática contra el Papa”. Esos ataques tienen por finalidad “vender, y sacar a los católicos de la esfera pública”.

“Los actos de pedofilia son un puro pretexto para acorralar a Benedicto XVI. Y es que sólo el Papa y la Iglesia se han tomado en serio este asunto” (menciona la carta a los obispos irlandeses).

“No soy católico, dice Juaristi, pero ni a mí se me escapa la inmensa talla moral del actual Pontífice”. Y añade: “el justicierismo supone siempre la corrupción del sentido de la justicia”, y “el blanco de los ataques ya no lo constituyen los curas pederastas y los obispos encubridores, sino el Papa, contra el que se ha movilizado la progresía justiciera”.

Finaliza diciendo que “como en este caso no parece que vaya a funcionar el principio de que, herido el pastor se dispersarán las ovejas, es previsible que la campaña arrecie durante algún tiempo”.

****

3-
http://www.ilgiornale.it/interni/ecco_che_cosa_ce_dietro_gli_attacchi_ratzinger/11-04-2010/articolo-id=436581-page=0-comments=1

Andrea Tornielli desentraña los tres ámbitos diversos de donde provienen los ataques contra el Papa:

•    Del interior de la propia Iglesia, por parte de clérigos que no están de acuerdo con el pontificado de Benedicto XVI
•    Los mass-media, que siempre buscan escándalos para vender
•    Los lobbies que pretender limitar el poder de El Vaticano

Tornielli resalta que se le acusa injustamente a Ratzinger, cuando él es el autor de que se haya cambiado la jurisdicción, en 2001, para que la Congregación para la Doctrina de la Fe, entonces a su cargo, pudiera atraer todos los casos de pederastia de todo el mundo. Anteriormente era competencia de cada diócesis, reaccionando cada obispo de forma diversa.

Más bien, dice el periodista italiano, es evidente que hay un cobro de facturas contra Benedicto XVI por haber rehabilitado la misa antigua, por haber levantado la excomunción a los lefebristas, por volver a distribuir la comunión de rodillas en El Vaticano, por haber firmado el decreto sobre las virtudes heróicas de Pío XII. Y cita al cardenal Angelo Bagnasco, presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, el cual declaró a CNN “Parece que hoy cada acto del Papa irrite ciertos ambientes”.

Todos estos ataques, finaliza Tornielli, “tienen por objetivo minar la credibilidad moral de la Iglesia en la opinión pública”.

Con el caso del P. Marcial Maciel, la sospecha llega hasta el entorno papal más cercano. Las denuncias y cartas no van a disminuir. A la curia le urge una estrategia de salida. Muchos esperan que la intervención de Benedicto XVI active esa estrategia.

****

La primera fuente de ataques señalada por Andrea Tornielli “desde el interior de la propia Iglesia católica”, quedó evidenciada, entre otras, por la Carta abierta del teólogo Hans Küng a todos los obispos del mundo (15 de abril de 2010), invitando a los pastores y a los fieles a rebelarse contra el Papa Benedicto XVI.

http://www.elmostrador.cl/seleccion/2010/04/15/la-encendida-carta-abierta-de-hans-kung-a-los-obispos-catolicos/

En ella afirma que el Papa está en contra de la “autoridad suprema” de la Iglesia, al relativizar los texos conciliares e interpretarlos de forma “retrógrada”, al apoyar la “misa medieval tridentina”. Pero Hans Küng no cita ningún texto.

Asegura que el Papa ha fracasado en asuntos de moral sexual, afirmando que desde el concilio Vaticano II “miles de obispos han abandonado su vocación, sobre todo debido a la ley del celibato”, a lo que se añade “todo el abuso de miles de niños y jóvenes por clérigos”. Acusa, falsamente, de que “existe un sistema de ocultamiento que fue dirigido por la Congregación para la Fe romana”. En realidad, fue el Papa Benedicto XVI quien atrajo todos los casos a su jurisdicción para poder ventilarlos y resolverlos.

Hans Küng incita a los obispos a rebelarse contra el Papa, argumentando que  “la obediencia ilimitada solo se debe a Dios”, minando el principio de autoridad.

****

Respecto a la tercera fuente de ataques, sionismo internacional y sectores jacobinos que quieren limitar la autoridad de la Iglesia desprestigiándola, el sitio de internet Pontifex  publicó (16/04/2010) las declaraciones del obispo de Grosseto, Italia, Mons. Giacomo Babini, acusando un “ataque sionista” por parte de los “judíos deicidas”, mismos que “destrozaron a los alemanes”.

http://www.pontifex.roma.it/index.php/interviste/religiosi/3973-massoni-ed-ebrei-contro-il-papa-sbagliato-chiedere-perdono-di-che-cosa-gli-ebrei-da-sempre-nemici-della-chiesa-e-deicidi-omosessuali-misericordia-ma-gli-animali-sono-piu-ordinati-di-loro-caso-claps-sconsacrata-la-chiesa


“La pedofilia es una cosa horrenda y bastaría un solo caso para gritar que hay un escándalo, pero me consta que también en otras confesiones existen y en proporciones mayores que en la Iglesia católica, pero está en acto una maniobra orquestada por los enemigos de siempre, es decir masones y hebreos, así como la intersección entre ambos, a veces no tan fácil de entender”. “Sostengo que es un ataque mayormente sionista, visto el poder y el refinamiento: ellos no quieren a la Iglesia, son sus enemigos naturales”. “En el fondo, históricamente hablando, los judíos son deicidas. El holocausto fue una vergüenza, sí, pero el furor nazi se desencadenó por los fraudes financieros de los hebreos que destrozaron la economía alemana”.


****

DATOS DUROS A CONSIDERAR:

1) Si a alguien se debe el haber destapado gran número de casos de abuso sexual, es precisamente al Papa Benedicto XVI, quien desde cardenal se propuso sanear esta situación. Esto lo ha demostrado en cantidad de actos de gobierno, documentos, directrices, cartas abiertas a los obispos, reuniones con las víctimas y solicitudes públicas de perdón. Su decisión es que todo se ventile para bien de la Iglesia.

2) Mons. Charles Scicluna, Promotor de Justicia de la Congregación para la Doctrina de la Fe, quien podría ser considerado el fiscal general de la Iglesia para los casos de abuso sexual, ha logrado recopilar, en 50 años, 3.000 casos de delitos de este tipo. Si se tiene en cuenta que hoy existen cerca de 500.000 sacerdotes diocesanos y religiosos, los casos de abuso, sin dejar de ser tristes, suponen un 0.6% de los sacerdotes del mundo. Por el contrario, cerca del 92% de los casos de abusos de menores se dan en las familias, y por lo mismo casi nunca son denunciados.

Datos recientes confirman esta realidad:

Austria: según las autoridades, en los mismos últimos 50 años, los casos de abusos sexuales en instituciones vinculadas a la Iglesia han sido 17, mientras que en otros ambientes suman 510.

Alemania: según un informe publicado por Luigi Accatoli (Corriere della Sera), de los 210.000 casos de abusos sexuales registrados desde 1995, solamente 94 corresponden a personas e instituciones de la Iglesia católica. Eso supone un 0.045%.”

3) Es importante distinguir: según Mons Scicluna, solo un 11% de los casos denunciados son estrictamente casos de pedofilia; el 89% de los casos registrados son de efebofilia (en relación con adolecentes y jóvenes).

4) El 12 de abril, el cardenal Tarcisio Bertone afirmó que no existe relación entre la pedofilia y el celibato, pero sí con la homosexualidad.

Los lobbies homosexistas reaccionaron indignados, pero a Bertone parece darle la razón el informe del despacho de abogados John Jay, a quien la conferencia episcopal norteamericana encargó en 2002 una investigación a fondo sobre el problema que entonces sacudía a la Iglesia en Estados Unidos. En ese informe se recoge que el 81% de los sacerdotes pedófilos habían abusado de menores de su mismo sexo. Y el 98% de ellos habían tenido antes relaciones homosexuales adultas.

Que no existe relación alguna con el celibato lo ha demostrado el estudio "Sexual Abuse in Social Context: Clergy and Other Professional".


5) La AP dio a conocer una carta de 1985 en la que el entonces cardenal Ratzinger aconsejaba prudencia en reducir al estado laical a un sacerdote pedófilo estadounidense de 38 años (quien fue dimitido dos años después, a los 40). La carta fue presentada como muestra de encubrimiento, pero las cosas no fueron así, y a las pocas horas se pudo demostrar la manipulación, si bien quedó ya el daño por la calumnia: 1) en esa época, la Congregación para la Doctrina de la Fe no era competente para casos de pedofilia, y la carta solo habla de la dimisión al estado clerical, no del procedimiento o las causas; 2) la dimisión del estado clerical no se decidía nunca antes de los 40 años de edad; 3) la solicitud fue solicitada por el mismo sacerdote inmiscuido; 4) Ratzinger solo pedía profundizar bien el caso para no faltar a la norma, dos años después llegó la dimisión; 5) nunca hubo un encubrimiento del culpable.

6) Cerca de un 10% de los ministros protestantes han sido encontrados y se han reconocido culpables de pedofilia, contra solo 0.6% del clero católico (ver artículo “Siéntete orgulloso de ser católico”, escrito por el empresario judío de Cleveland Sam Miller http://fratres.wordpress.com/2008/06/24/redemption-comes-through-the-jews-jewish-businessman-sam-miller-whaps-anti-catholic-bias-in-news-media-full-text/ )

7) Philip Jenkins, profesor de Historia y Estudios Religiosos de la Universidad de Pensilvania, afirma que se concentra el foco en los católicos prescindiendo de lo que ocurre en otras confesiones, y sobre todo en los maestros y profesores. Otro estudio, realizado durante los primeros seis meses del 2002, lo constata: Los 61 mayores periódicos de California publicaron 2.000 historias sobre posibles casos de pedofilia de sacerdotes por solo 4 acerca de abusos en escuelas públicas, a pesar de ser abrumadoramente más numerosos según los datos oficiales.

8) La Iglesia Católica es la única organización que trata con menores y ha adoptado medidas decisivas. Ningún gobierno de ningún país ha hecho nada parecido, a pesar de que la lacra es mucho mayor en los centros públicos. Nadie más lo reconoce públicamente. Ningún periódico ha pedido jamás la cabeza de un ministro de educación o un secretario general por esta causa. La Iglesia desde 1983 ha establecido, revisado y ampliado normas, adoptado decisiones públicas de gran dureza, como con el padre Maciel, ha suspendido sacerdotes, cerrado las parroquias, aportado dinero sin obligación judicial. ¿Quién puede decir lo mismo? Con mucho menos motivo ha hecho mucho más. (Ver artículo publicado en La Vanguardia el 4 de abril 2010 /  Iglesia y pederastia. Medirlo todo, medirlo bien; 2004-2010 FORUM LIBERTAS: Noticias de actualidad en España).

******

EN RESUMEN (tomado de la Carta Pastoral de sacerdotes de la catedral Ibagué):
•    “La pedofilia (abuso sexual de menores) es una enfermedad y un delito que no es exclusivo de un país o de una institución, en este caso la Iglesia, como quieren hacer ver algunos medios de comunicación parciales;
•    es un problema que se presenta a nivel social y que por lo tanto se puede evidenciar en distintos sectores: la familia, el colegio, los amigos, entre otros;
•    siendo tan pocos los casos de pederastia en el mundo los que tiene la Iglesia Católica, es inmensamente injusto generalizar calificando a todos los sacerdotes como pedófilos;
•    no hay relación directa entre celibato y pedofilia pues, como se ha evidenciado, la mayoría de pedófilos son casados. Detrás de las infames acusaciones que generalizan y ponen como exclusiva esta enfermedad en las filas de la Iglesia hay una sistemática campaña de desprestigio que busca atentar contra su autoridad moral para denunciar los graves problemas del mundo moderno.
•    Con todo, el reconocimiento ha desembocado en un esfuerzo conjunto para garantizar que en el futuro los niños estén protegidos de estos delitos.
•    Si bien es cierto que en algunos casos por motivos pastorales hubo una tendencia equivocada a evitar llevarlos a los estrados de la justicia ordinaria, sin embargo no es cierto que la Iglesia sea encubridora de estos delitos. Al contrario, desde la década pasada en toda la Iglesia Universal se ha insistido en que las víctimas denuncien el delito ante las autoridades competentes pues los sacerdotes son también ciudadanos con responsabilidades”.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario