jueves, 2 de enero de 2014

Forbes: Putin es el hombre más influyente del año

Forbes: Putin es el hombre más influyente del año

Forbes: Putin es el hombre más influyente del año

Una noticia de las más notables de 2013 fue la publicación de la lista de las personas más influyentes del mundo de la revista norteamericana Forbes. El presidente de EEUU, Barack Obama, tuvo esta vez que hacerse a un lado, en cuanto a influencia en el sistema mundial de relaciones, para dejar paso a su homólogo ruso, Vladímir Putin.

Los expertos vincularon tal decisión al éxito, a todas luces de Moscú, de evitar la operación armada que países occidentales se aprestaban a lanzar contra Siria, víctima de un dilatado conflicto civil, y a una serie de otros éxitos en política exterior e interna del Kremlin.
Forbes es una publicación analítica de gran prestigio. En sus cerca de cien años de historia ha conquistado la confianza en la información que publica, incluida la clasificación de políticos y empresarios. No es la primera vez que Vladímir Putin figura en las páginas de esta revista entre las personas más influyentes. Pero sí es la primera vez que lo sitúa en la cima. El segundo lugar fue para Barack Obama, y el tercero para el titular de China, Xi Jinping.
Este trío refleja en los hechos la correlación real en la política global. Y tal correlación justamente de protagonistas revela que la elite política estadounidense ha reconocido la relevancia de los esfuerzos desplegados por el líder ruso en los más distintos campos. Desde la promoción de los intereses geopolíticos y económicos de Rusia, hasta la defensa consecuente, y lo principal, eficaz de los principios del derecho internacional y de los derechos de los Estados soberanos. Caso contrario, Siria habría sufrido las gravísimas consecuencias de una intromisión armada externa, y el programa nuclear civil de Irán sería motivo para el recrudecimiento de sanciones contra el país y otras formas de coacción sobre sus líderes. Sin embargo, en el caso de Siria, merced a la participación activa de Putin, todo quedó en la eliminación del arma química como alternativa a la agresión bélica.
Dmitri Abzalov, vicepresidente del Centro de Comunicaciones Estratégicas, se refiere a los principios de la formación de la lista creada por Forbes:
—Uno de ellos es el informativo, es decir, el grado de frecuencia con que el político es mencionado en losmass media. El segundo se refiere al grado de participación en la toma de decisiones, y si de su postura y acciones depende la situación en general en el contexto internacional. Y en este sentido, el rating no tiene nada de sorprendente. Uno de sus componentes fue, sin duda, el conflicto en Siria que amenazaba con degenerar en una lucha étnica y religiosa.
El experto añade que las iniciativas del presidente de Rusia sobre Siria influyeron no solo sobre la situación en la región, sino también en el mercado norteamericano y en el sistema político del país. En esencia, las propuestas de Putin dieron a Barack Obama la posibilidad de renunciar a una variante blindada en Siria y, de esa manera, impedir el ahondamiento del cisma entre demócratas y republicanos. El periodista francés Dmitri de Coscou considera que la clasificación actual refleja cabalmente el cuadro real:
—Putin es de veras un político influyente. Su papel es enorme, entre otras cosas, en el conflicto sirio. Aquel papel que desempeñó, aunque es posible que no todo lo que hubiera querido en el caso Snowden, es también importante. Lo que sucede hoy entre Europa y EEUU fue posible debido a que Snowden no está entre rejas o no fue eliminado, sino que encontró asilo en Rusia. Putin ha actuado este año enérgicamente en la arena mundial, y dentro del país sigue siendo popular, aunque hace tiempo que está en el Kremlin.
La revista Forbesmisma explicaba su opción señalando que Vladímir Putin ha concentrado todo el poder en Rusia en sus manos. Mientras que Barack Obama, a juicio de la redacción, volatizó los puntos políticos.
Con tal trasfondo, la mayoría de los norteamericanos se desencariñó de Obama. Su clasificación interna, como lo revelan los sondeos de la Universidad de Quinipiac y el periódico The Wall Street Journal, cayó hasta el mínimo. Más del 50 % de la población está insatisfecha con la labor de su líder. Este es el índice de popularidad más bajo registrado por un inquilino de la Casa Blanca. El 54 % de los electores no aprueba como cumple su mandato. Hace un mes, los descontentos sumaban el 49 %. La dinámica para Obama es alarmante. En la prensa estadounidense escriben que terminó su luna de miel con los electores y que al presidente le “tiembla el piso”.
Y no se trata solamente de la escandalosa reforma sanitaria, sino de toda una sucesión de fracasos, comenzando con el problema sirio y terminando con la naufragada política monetaria y financiera. Ella sigue asentándose en el crecimiento de la masa circulante no asegurada, en el abultamiento de la ya sideral deuda fiscal de más de diecisiete billones de dólares que ha puesto al país al borde de la suspensión de pagos y que desatara el cierre temporal de decenas de instituciones públicas. En la popularidad de Obama inciden también los recortes en gastos sociales, la inseguridad de los norteamericanos en el futuro, la cesantía, los casos acaecidos de masacres como consecuencia de la desaceleración del crecimiento; a ello se suma el escándalo del caso Snowden, y el intento de las autoridades de someter a su control poco menos que al mundo entero, mientras que los asuntos dentro del país están a años luz de lo ideal. Así las cosas, en el próximo rating anual de Forbes, es perfectamente posible que Obama salga volando del primer trío.
sb/as/sm
Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción de La Voz de Rusia.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario