Primakov: EEUU presenta un ultimátum al Ejército egipcio

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El exprimer ministro de Rusia, exministro de Exteriores (1996-1999) y destacado especialista en Oriente Próximo, Evgueni Primakov, dio una entrevista exclusiva a La Voz de Rusia.

La Voz de Rusia–Comparto la difundida opinión de que al principio de la “primavera árabe” el gobierno de EEUU y otros políticos occidentales experimentaban un estado de euforia a causa de esa revolución. Es que la “primavera árabe” provocó el derrocamiento de una serie de regímenes autoritarios respaldados por EEUU y sus aliados. Pero como resultado de la “primavera árabe” la situación empezó a cambiar.

Esto se produjo con mayor intensidad en Egipto, donde el poder se vio en manos de la organización Hermanos Musulmanes, que, dicho sea de paso, no fue la promotora de los cambios revolucionarios en el país. Pero, siendo la organización más fuerte, los “hermanos” se aprovecharon del triunfo obtenido sobre el régimen derrocado.

Al asumir el poder, el nuevo presidente egipcio Morsi empezó a apartarse del carácter secular del Estado. Este apartamiento iba acompañado de una ampliación desmesurada de las funciones del presidente y se hacía sentir en la cada vez peor situación económica.

¿A qué se deben las enormes proporciones del descontento de los egipcios, que se tradujo en el derrocamiento del presidente? Se deben a que la profesión de la fe islámica por mayoría de la población egipcia no implica la aceptación de un Estado islámico.

Las informaciones que publican los medios apuntan a que EEUU intenta controlar la crisis, pero concentró prácticamente casi toda su presión en una de las partes: en el ejército. Los norteamericanos amenazaron a los uniformados con cesar la ayuda financiera de 1,3 mil millones de dólares anuales, en caso de que se consuma un golpe de Estado militar.

Estas amenazas se profirieron precisamente en el momento en que el ejército declaraba que no intervendrá contra el pueblo, que exige encontrar una salida pacífica a la situación. Los norteamericanos presentaron un ultimátum al Ejército egipcio, en el momento mismo en que muchos ciudadanos consideran que el ejército es la única fuerza capaz de prevenir un derramamiento de sangre.

Sabido es que EEUU establecía contactos con los Hermanos Musulmanes. Así lo decía la exsecretaria de Estado, Hillary Clinton. Cabe preguntarse: ¿La actual posición de EEUU apunta a respaldar las aspiraciones democráticas de los egipcios, que desembocaron en un movimiento masivo de protesta contra los Hermanos Musulmanes? Pienso que no.

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