martes, 30 de abril de 2013

Renuncia candidato presidencial oficialista

29 abr, 21:52 EDT
Renuncia candidato presidencial oficialista

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AP Photo/Jorge Saenz

SANTIAGO, Chile (AP) -- El precandidato presidencial Laurence Golborne, famoso por encabezar el rescate de 33 mineros que quedaron atrapados en una mina en el desierto de Atacama en 2010, renunció el lunes a la carrera electoral luego de que un diario revelara que posee cuentas bancarias en un paraíso fiscal.
A los pocos minutos, la centroderechista Unión Demócrata Independiente, por la que competía Golborne, nombró como su reemplazo al ministro de Economía, Pablo Longueira, quien siempre ha tenido aspiraciones presidenciales y es muy respetado en su colectividad.
La renuncia de Golborne sucede después de que la justicia obligara a un hipermercado a devolver dineros por cobros abusivos realizados a varios de sus clientes, cuando Golborne era su gerente.
La decisión ahonda la crisis política que padece la centroderecha chilena mientras la centroizquierda está detrás de la ex presidenta Michelle Bachelet (2006-2010) en las elecciones primarias del 30 de junio y en los comicios presidenciales del 17 de noviembre.
Golborne, que competía por la representación del oficialismo con el apoyo de un partido ultraconservador, en el que no milita, parecía dejar sólo al ex ministro de Defensa Andrés Allamand, del centroderechista Renovación Nacional, pero la Unión Democrática sacó de inmediato su as debajo de la manga.
Allamand carece del carisma de su adversaria pero tiene una vasta experiencia política.
"En este momento yo bajo mi candidatura a cualquier forma de postulación", dijo Golborne, que se presentó en la sede de ese partido.
Agregó que el objetivo de que la centroderecha siga en el poder sólo se conseguirá con la unidad e insistió en que el oficialismo debe participar en primarias.
Patricio Melero, presidente de la colectividad política, le respondió en medio de los aplausos de los consejeros y parlamentarios presentes, "sabíamos que eras grande cuando te proclamamos, hoy eres un gigante".
Los problemas de Golborne empezaron la semana última cuando un fallo de la Corte Suprema ordenó al hipermercado Jumbo devolver 70 millones de dólares a poco más de 608.000 clientes, a quienes les subió el cobro de mantención de su tarjeta en 500 pesos mensuales, 1 dólar actual, en lo que fue estimado "un cobro abusivo" por la justicia.
Golborne, que era el gerente general, dijo primero que sólo había obedecido órdenes al respecto pero en una emisión estelar del canal estatal admitió la noche del domingo que estuvo entre quienes le recomendaron a la junta directiva de la compañía Cencosud, dueños de Jumbo, Easy y otras tiendas, aplicar el alza y utilizar una disposición legal que permitía que, si transcurrían 60 días sin rechazos de los clientes, se daba por entendida su aceptación.
Este hecho afectó su imagen de un esforzado hombre de clase media que puede surgir y escalar posiciones sociales de abajo.
El fin de semana también se conoció que tiene cuentas en las Islas Vírgenes, un conocido paraíso fiscal. Ninguna de las dos situaciones es ilegal, pero afectaron su candidatura.
Dirigentes de la Unión Demócrata culparon a Allamand por la crisis, porque él le había dicho a Golborne que debía asumir las consecuencias de sus actos, en alusión al fallo de la Corte Suprema.
El senador Jovino Novoa dijo que las relaciones con el partido Renovación Nacional quedaron muy dañadas.
Los directivos del partido decidirán en las próximas horas si Longueira competirá en las primarias contra Allamand, pues el plazo para las inscripciones vence el martes a la medianoche.
Longueira, conocido por su carácter fuerte y decisión, pronunció un largo discurso, en mangas de camisa, y aprovechó de criticar de inmediato a Bachelet, quien será, casi con seguridad, su rival en las elecciones presidenciales de noviembre.
"El país necesita más que nunca que salgamos a recorrer cada rincón de Chile, cada plaza de Chile", instó a su público.
Les dijo que el oficialismo "no va a ser una coalición donde esté el Partido Comunista", añadió Longueira, en alusión a Bachelet, que busca el apoyo de los comunistas a cambio de cederles cupos parlamentarios.
Longueira es el jefe máximo del organismo estatal responsable de las estadísticas chilenas, cuyo director renunció el viernes por supuestamente manipular el censo del año pasado, lo que repercute en la inflación, los dineros asignados a las políticas públicas, sueldos mínimos, ingreso per cápita, entre otros elementos.
Quien estaba de segunda al mando en el Ministerio, lo acusó de aumentar en 600.000 personas el número de chilenos, diciendo que son 16,4 millones.
El presidente Sebastián Piñera deberá nombrar a un nuevo Ministro de Economía, lo que implicará un segundo cambio ministerial en menos de un mes.
A los pocos minutos de que Longueira concluyera su discurso, Allamand, en su comando, recordó que con el nuevo candidato "juntos fuimos la mejor oposición que Chile haya tenido".
"Si él gana (las primarias), al día siguiente, yo el primero y todos ustedes, vamos a estar detrás de él para apoyarlo en lo que él estime, y sabemos que él va a actuar de la misma manera", aseguró Allamand.
Sus palabras parecían invitar a que se firmara la pipa de la paz entre ambos parridos para que, unidos, pudieran competir contra Bachelet.
Guillermo Holzmann, politólogo de la Universidad de Valparaíso, dijo a la Associated Press que el conflicto en la alianza oficialista "va a tener consecuencias relevantes en términos de la imagen de unidad que le quieren mostrar a sus seguidores".
Agregó que la crisis "puede llevar al gobierno a tomar distancia de la campaña presidencial y deja a la Alianza en una situación bastante disminuida en términos de posibilidades reales de poder enfrentar a Michelle Bachelet, quien poco a poco se ha ido consolidando como una alternativa (de la centroizquierda)".
El analista Marcelo Mella, de la Universidad de Santiago, dijo a la AP que "tener a Longueira de candidato significa que la máquina político electoral de la UDI (Unión Democrática) sale a terreno y uno podría esperar una mejor capacidad de desempeño de la derecha, es decir, un mejor resultado".
Bachelet, a quien todas las encuestas dan como ganadora en las presidenciales, quiere cambiar la Constitución para cambiar el sistema electoral chileno que sólo permite que lleguen al congreso representantes de grandes bloques y excluye a todos los partidos pequeños, también espera que se otorgue el derecho a voto a los chilenos que viven en el exterior.
Para ello, necesita una mayoría parlamentaria sustancial, y sino la consigue el sistema electoral heredado de la dictadura continuará.
Mella añadió que "quizás vale más la pena para este sector replegarse en la defensa de la matriz constitucional chilena", nacida en dictadura.
Actualmente la oposición tiene 20 votos en el Senado y el oficialismo 16, más los dos de legisladores independientes que suelen sumarse a la derecha. En la Cámara de Diputados hay una leve mayoría de centroizquierda
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En esta noticia colaboró el corresponsal de AP en Santiago, Luis Henao
© 2013, La Prensa Asociada.

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