Libre, el General Ángeles culpa a Marisela Morales
El General Ámgeles a su salida del Penal del Altiplano
En punto de las 22:20 horas, el ex subsecretario de la Defensa Nacional atravesó a pie la reja del estacionamiento de la instalación estratégica ante la mirada de dos custodios y enfiló por el acceso vial acompañado de su abogado Ricardo Sánchez Reyes Retana. Pudo solicitar a su defensor que acercara su camioneta a la puerta, pero no lo hizo. Vestido de pants y sudadera grises y tenis blancos, caminó cerca de 30 metros hasta la carretera del ex rancho La Palma.
“En cuanto a la Procuradora anterior, Marisela Morales, desafortunadamente no hay buenos comentarios. Lo estoy viviendo yo, lo están sufriendo los compañeros militares y cantidad de internos en este penal y creo que en todos”, sostuvo el Divisionario, que en noviembre pasado cumplió 70 años de edad, en sus primeras declaraciones en libertad.
La Subprocuraduría Especializada de Investigación en Delincuencia Organizada (SEIDO) de la PGR que encabezó Morales lo detuvo el 15 de mayo del año pasado, y después lo arraigó hasta que el 6 de agosto consiguió que el Juez Tercero de Procesos Penales Federales en el Estado de México le dictara auto de formal prisión. Fue acusado de utilizar sus cargos en el Ejército para gestionar ante otros mandos que la organización criminal de los Beltrán Leyva descargara cocaína en los aeropuertos de Cancún, Cuernavaca y Toluca. El sustento fueron sólo las declaraciones de los testigos protegidos “Mateo”, quien es Sergio Villarreal, “El Grande”, un ex lugarteniente del grupo, y “Jennifer”, el mismo al que apenas el pasado lunes un juez federal en Nayarit calificó de mentiroso.
“Fueron imputaciones dolosas y falsas”, agregó Ángeles Dauahare, tras declinar especular si la persecución en su contra se trató de una venganza política o un mecanismo para evitar que en este sexenio fuera titular de la Sedena.
“Permítanme no contestar esta pregunta. Es volver a abrir heridas y la verdad no quiero flagelarme”, respondió.
Las imputaciones, no obstante, lo mantuvieron 9 meses en la prisión de más alta seguridad del país, la cual algún tiempo albergó a capos del nivel de Osiel Cárdenas Guillén. En las celdas del Pasillo 1 del Módulo de Control, Observación y Calificación del Cefereso, Ángeles Dauahare convivió diario con los Generales Ricardo Escorcia Vargas, Roberto Dawe González y Rubén Pérez Ramírez, además del Teniente Coronel Silvio Isidro de Jesús Hernández Soto y el Mayor Iván Reyna Muñoz, también implicados por la SEIDO en la supuesta protección a los Beltrán Leyva.
El ex subsecretario se acopló a la vida dentro del penal y, a petición de la dirección, brindó 4 clases a los internos sobre los símbolos nacionales.
Ángeles Dauahare agradece a la administración del Presidente Enrique Peña Nieto conducirse “en otra frecuencia” en materia de procuración de justicia. Desde enero, la PGR informó al juez Raúl Valerio Ramírez que carecía de pruebas para sustentar las declaraciones de los testigos protegidos, por lo que la defensa del General pidió cerrar el proceso.
Ayer, la PGR ratificó en sus conclusiones que el General no tenía culpabilidad, lo que llevó a Valerio Ramírez a decretar el sobreseimiento de la causa penal y a ordenar su absoluta e inmediata liberación. Por la noche, un actuario del Juzgado notificó al penal la determinación para que se iniciara el trámite de su salida.
“Necesito ver qué actitud asumir, de demanda, de denuncia. Lo tengo que consensuar, tengo que consultarlo con personas que saben de esto y, sobre todo, considerando que es una nueva administración. No quiero lesionar para nada a esta administración que ha cumplido su palabra de apegarse al estado de derecho”, explicó.
El General de División, quien dejó el cargo de subsecretario en 2008, tiene como prioridad ahora ver por su salud: irá a revisarse el aparato digestivo, al urólogo, al neumólogo, al oftalmólogo, al otorrinolaringólogo y a practicarse una endoscopia. Después solicitará una audiencia con el Secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, para ponerse a sus órdenes. A Guillermo Galván, ex titular de la Sedena en el sexenio anterior y amigo de carrera, no piensa buscarlo.
Anoche iría directamente con su familia, aunque no sabía si su esposa Leticia Zepeda le tenía algo preparado en su departamento, ubicado en la unidad del ISSFAM en Tlalpan, o en su casa en Cuernavaca, Morelos. “No se qué dispuso mi mujer”.
El General de División que inició su carrera militar en 1961 espera que en breve también abandonen sus compañeros el penal y que se reformen las regulaciones para restringir el uso de testigos protegidos, cuyo uso durante el sexenio anterior considera que fue aberrante.
Por algo, relató, “los internos del penal del Altiplano aplaudieron cuando Peña Nieto fue ratificado el año pasado como presidente electo del país, dejando a un lado a las administraciones del PAN”.
“Hay esperanza en que se les haga justicia. No quieren nada, simplemente que se les juzgue por lo que hicieron, quitando el plus de todo lo que les agregaron”, expresó.
Conclusiones de la PGR
Fue hace dos días cuando la PGR presentó ante el Juzgado sus conclusiones no acusatorias, donde expone que el llamado testigo protegido “Jennifer” incurrió en falsedad de declaraciones.
A las 2:00 pm la PGR ratificó sus conclusiones, por lo que el juez tendrá tres días hábiles para determinar la libertad del general, aunque se espera que sea hoy mismo.
La esposa del general Ángeles Dauahare afirmó que lo ocurrido a su esposo es una injusticia, aunque no ocultó su alegría tras conocer el desistimiento de la PGR sobre la acusación que mantenía contra el militar retirado.
“Ya estamos enterados (de la decisión de la PGR de no continuar con la acusación), vienen las cuestiones del papeleo, los asuntos administrativos, no puedo hablar de tiempo“, expresó Zepeda.
“Pronto saldrá libre, por un lado nos da gusto, por otro lado nos da tristeza porque es algo que no debió de haber ocurrido nunca, no obstante con la libertad de mi marido es algo que será bueno para el país y para tanta gente que está como él en la misma situación”, dijo la esposa del general Ángeles Dauahare.
Hoy se dio a conocer que la Procuraduría General de la República (PGR) informó al juez Tercero de Distrito de procesos penales federales con sede en Toluca, Estado de México, Raúl Valerio Ramírez, su decisión de no presentar conclusiones acusatorias contra el ex subsecretario de la Defensa Nacional, Tomás Ángeles Dauahare.
Debido a lo anterior, el juzgador solicitó a la PGR ratificar su postura respecto de que no se emita sentencia contra Ángeles Dauahare.
De ocurrir la ratificación, el militar quedará en libertad de manera inmediata y el proceso sobreseído, lo cual se prevé que ocurra a más tardar el próximo fin de semana.
El 22 de enero pasado, en un hecho inédito, la PGR reconoció ante un juez federal que no tenía pruebas que confirmaran las declaraciones de los testigos protegidos que incriminaron al General Tomás Ángeles Dauahare de proteger al cártel de los Beltrán Leyva, así como a cinco militares más vinculados al mismo caso.
La dependencia admitió que no pudo corroborar los dichos de “Jennifer” y Sergio Villarreal “El Grande” en la investigación que llevó a la cárcel al Divisionario, de acuerdo con documentos judiciales.
En julio de 2012, la PGR, entonces al mando de Marisela Morales, desechó la acusación contra Ángeles Dauahare que lo responsabilizaba de promover el narcomenudeo en el Colegio Militar cuando fue su director.
Entonces, Morales indicó que la acusación sobre narcomenudeo contra Ángeles se hizo de manera anónima a la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (entonces SIEDO), quien se encargó de verificar la imputación y no encontró sustento en ella.
El 17 de mayo de 2012, el Juzgado Primero Federal Penal Especializado en Cateos, Arraigos e Intervención de Comunicaciones, concedió a la SIEDO una primera orden de arraigo contra los generales Dauahare y Roberto Dawe González.
Como parte de la misma investigación también se encontraban bajo arraigo los generales Ricardo Escorcia, y Roberto Dawe González, además del teniente coronel Silvio Isidro de Jesús Hernández.
Tomás Ángeles Dahuare. El 21 de junio de 2012, Ángeles Dahuare envió una carta al presidente Felipe Calderón desde el centro de arraigos de la PGR, en la que aseguró que todos los testigos que han declarado en su contra son
de oídas, además de que sus manifestaciones son inverosímiles y mentirosas, por lo que carecen de sustento jurídico. ”Me permito manifestar que a la luz de nuestro sistema jurídico, y aún más, de nuestro estado de derecho, no es dable tener por ciertos los testimonios de personas sin constatar los hechos materia de su narración; máxime si existen pruebas en contrario, puntualizó quien hasta 2008 fue el segundo militar de importancia dentro de la estructura orgánica de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena)”, señalaba la misiva.
El 15 de mayo de 2012, elementos del Ejército mexicano detuvieron a dos generales presuntamente vinculados con el crimen organizado: Ángeles Dauahare y Dawe González.
A ambos, de acuerdo con fuentes de la PGR, se les investigaba por sus presuntos vínculos con un cártel del narcotráfico.
Tres días después, el 18 de mayo, la PGR informó que los generales Ángeles Dauahare y Dawe González serían arraigados por 40 días, la SIEDO obtuvo del juez primero federal penal especializado en cateos, arraigos e intervención de comunicaciones, la medida cautelar.
El teniente coronel de caballería retirado Silvio Isidro de Jesús Hernández Soto y el general de división diplomado de Estado Mayor retirado Ricardo Escorcia Vargas fueron detenidos horas después bajo la misma acusación de presuntos nexos con el narcotráfico y arraigados la noche del sábado 19 de mayo de 2012.
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