jueves, 10 de enero de 2013

La PGR peñista contra tres mujeres indígenas

La PGR peñista contra tres mujeres indígenas

Se devela el rostro del peñismo. Y es que la justicia seguirá siendo una ilusión. La Procuraduría General de la República (PGR), donde despacha Jesús Murillo Karam (del grupo del supersecretario de Gobernación, Osorio Chong) decidió no reparar el daño a tres mujeres indígenas absueltas en la última instancia judicial de una falsa acusación, que reclamaron la reparación del daño que les causó su encarcelamiento. Entonces es puro cuento lo de respetar los derechos humanos, y el peñismo seguirá los pasos del calderonismo para impartir injusticia y no acatar resoluciones de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que atrajo el caso y resolvió que las tres mujeres habían sido víctimas de un proceso amañado para sentenciarlas a como diera lugar. Pero la PGR pasa por encima de la sentencia absolutoria y de su obligación para ordenar la indemnización que merecen por su sufrimiento.
 
El peñismo ya cometió su primera violación a los derechos humanos (Emir Olivares, La Jornada, 20 de diciembre de 2012) al negar la reparación de los daños que padecieron Jacinta Francisco Marcial, Alberta Alcántara Juan y Teresa González Cornelio, y muestra la misma cara que mostró en Atenco y que es el rostro del obregonismo sangriento que comete injusticias. En lugar de defender y representar los intereses sociales de los mexicanos, en su competencia federal, la PGR mantendrá la mano dura contra los pobres que ni siquiera tienen derecho a una justicia a secas. Murillo Karam libera a una mujer policía arraigada injustamente. Pero abusa del poder contra tres indígenas que vivieron un infierno de torturas, cárcel y amenazas por delitos que no cometieron.
 
Y que por ser indígenas no tienen derecho a que les reparen ese daño. La SCJN resolvió que fueron culpadas y sancionadas por abusos de la policía, el ministerio público y sus juzgadores en tribunales corruptos. Pero Murillo Karam decidió que ellas no merecen que el gobierno federal les otorgue una reparación económica. No fueron perdonadas, ¡fueron absueltas! Son inocentes jurídicamente. Pero esto no lo entiende Murillo Karam, quien no merece seguir al frente de esa institución. La PGR de Calderón las acusó falsamente, la PGR de Peña continuará los fines del priísmo empanizado, donde el Ministerio Público seguirá pisoteando los derechos humanos.
 
No obstante que algunos peñistas tienen colmillo del antiguo Partido Revolucionario Institucional y el más calvo se hace trenzas, parece que en su arranque no ven más allá de su nariz y olvidan que si se acumulan más agravios a la crisis económica, la sociedad mexicana empobrecida, estallará en revueltas que rebasen las actuales manifestaciones de protesta, y la violencia social (ya tenemos la violencia de los delincuentes) hará acto de presencia sumándose a los cuestionamientos al peñismo en todo el país. Todo eso se iniciará a partir de las injusticias, como la cometida por la PGR de un Murillo Káran que no midió las consecuencias de burlarse de esas tres mujeres mexicanas que por ser indígenas les niegan la reparación del daño que padecieron por un proceso penal manipulado por las maniobras de un tribunal que la SCJN ha invalidado. El peñismo, pues, busca despeñarse.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario