martes, 18 de diciembre de 2012

Humberto Moreira denunció un “Estado de excepción”

Humberto Moreira denunció un “Estado de excepción”

El ex mandatario movilizó tropas sin proteger a civiles, acusa; responsabiliza a Calderón de violar los tratados de Ginebra

Reyna Lorena Rivera

CIUDAD DE MÉXICO, 18 de diciembre.- Humberto Moreira Valdés, ex gobernador de Coahuila, acusó ante la Corte Penal Internacional de La Haya a Felipe Calderón de haber impuesto “un Estado de excepción” con pretexto de la lucha contra el narcotráfico.
El documento de 40 páginas y 16 capítulos que Moreira Valdés envió a la fiscal Fatou Bensouda, y del cual Excélsior posee una copia, está fechado el 28 de noviembre, cuando Calderón aún estaba en funciones como Presidente.
En la denuncia, el también ex dirigente del PRI hace “directamente responsable” al entonces presidente Felipe Calderón de los crímenes que se le imputan, en su carácter de comandante supremo de las Fuerzas Armadas.
El capítulo 11 titulado Guerra contra el Narcotráfico, describe cómo “el Presidente de la República declaró un Estado de guerra interna en México, y movilizó a las tropas en el territorio nacional, sin proteger a la población civil mediante la suspensión de Garantías Constitucionales”.
Contextualiza que el 11 de diciembre de 2006, Calderón ordenó la movilización de tropas al interior del país, con el objetivo de combatir y erradicar a las bandas de narcotraficantes asentadas en Michoacán.
El ex gobernador de Coahuila relata a la fiscal de La Haya que “la guerra contra el narcotráfico no se ha dado como un plan de acción aislado, sino que ha sido el eje rector de la política nacional del presidente Felipe Calderón”.
Agrega que “la movilización de las Fuerzas Armadas fue ordenada por el mandatario sin haber suspendido las Garantías Constitucionales, previa autorización del Congreso”.
Moreira Valdés consigna en la denuncia que a raíz de la Operación Conjunta Michoacán, la guerra contra el narcotráfico se extendió en todo el país “sin que se conozca a ciencia cierta el número de muertos que ha provocado, especulándose que los mismos pueden ser de 50 mil hasta 150 mil”.
En el documento señala que, además, no es posible conocer con exactitud el número de violaciones a los derechos humanos cometidos por las tropas, donde la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ha emitido diez recomendaciones generales a las Fuerzas Armadas, así como 102 a la Secretaría de la Defensa y a la Secretaría de Marina, en el periodo comprendido de diciembre de 2006 a abril de 2012.
Así, también presenta un resumen actualizado de la situación en México en que destaca que la estrategia del Presidente funcionó sin protocolos de uso de la fuerza y por eso las intervenciones policiales y militares acumularon más abusos que nunca.
“Con dicha estrategia los reportes de la tasa de homicidios, sólo en relación con la delincuencia organizada, mostraron un incremento de 260% entre 2007 y 2010, contándose dos mil 826 homicidios en el primer año y 15 mil 273 en el segundo… se reportaron 996 niños y niñas muertos en México entre diciembre de 2006 y octubre de 2010 a causa de la guerra contra el crimen organizado.”
Para 2010, continúa el desglose, 230 mil personas habían sido desplazadas debido a la violencia generada por la guerra contra la delincuencia organizada.
“Entre diciembre de 2006 y febrero de 2010, los siete cárteles de narcotráfico reconocidos tuvieron mil 306 bajas por prisión, y 500 mil personas participan en sus filas… En la guerra contra el narcotráfico han participado 70 mil militares y marinos.”
El capítulo 14, Humberto Moreira Valdés señala que tiene como objetivo fundar la responsabilidad criminal internacional del Presidente de los Estados Unidos Mexicanos “al comandar y movilizar a las Fuerzas Armadas mexicanas, sin respetar los requisitos constitucionales ni los tratados de Ginebra, propiciando que las tropas bajo su mando atenten contra la vida e integridad de las personas que no participan en las hostilidades, sujetándolas a tratos crueles, tortura y ultrajes contra su dignidad personal, imponiéndoles especialmente tratos humillantes y degradantes.
“Consecuentemente, el Presidente de la República es, posiblemente, directamente responsable de los crímenes que se le imputan, en su carácter de comandante supremo de las Fuerzas Armadas.”
Argumento
Humbero Moreira asegura ante la Corte Penal Internacional que el ex presidente Felipe Calderón actuó al margen de la ley fundamental:
Impuso “un Estado de excepción en el que, lejos de proteger a la población civil en las operaciones militares, como lo prescriben los tratados de Ginebra, las Fuerzas Armadas sistemáticamente han venido atentando contra la vida y la integridad corporal de las personas que no participan en las hostilidades, y les sujeta a tratos crueles, tortura y ultrajes contra su dignidad personal, imponiéndole especialmente tratos humillantes y degradantes”.
2012-12-18 06:51:00

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